¿Cuándo está indicada la operación en caso de una parálisis recurrencial?
En caso de una parálisis de cuerdas vocales (parálisis recurrencial), la cuerda vocal afectada está paralizada, de modo que no es posible cerrar el pliegue vocal por completo durante la entonación. En parte puede estar asociado con una afonía grave, disnea e ingestión.
En caso de que no se produzca ninguna mejora en la voz en un periodo de seis meses (con o sin terapia de la voz), se supone que la parálisis manifiesta ya no se resolverá por sí misma.
Ahora existe la posibilidad de conseguir un cierre completo de las cuerdas vocales durante la entonación o de una forma notablemente mejorada con una intervención quirúrgica; ese tipo de intervención tiene un efecto positivo en el sonido de la voz, pero también en el consumo de aire y en la ingestión frecuente.
Parálisis de cuerdas vocales (preoperatorio)
Parálisis de cuerdas vocales (postoperatorio)
Audio: parálisis recurrencial (preoperatorio)
Audio: parálisis recurrencial (postoperatorio)
Método de operación del Dr. Wohlt
El método de operación utilizado por el Dr. Wohlt es el recubrimiento inferior de los pliegues vocales con tejido adiposo del cuerpo del paciente.
El proceso de recubrimiento inferior de las cuerdas vocales o aumento de pliegues vocales se conoce desde hace mucho tiempo. En el transcurso del tiempo, los materiales utilizados para el recubrimiento inferior han ido cambiando.
Al principio, se utilizaba parafina para este tipo de intervenciones, y después pasta de teflón. Entretanto, hay una serie de materiales artificiales a disposición.
Concretamente, cabe mencionar los siguientes:
- Ácido hialurónico
- Hidroxiapatita cálcica
- Compuestos de silicona
Todas estas sustancias son materiales artificiales que pueden provocar reacciones alérgicas o de rechazo en el contexto de un proceso inflamatorio. Además, con algunos polímeros de plástico se producen en los tejidos fenómenos imprevisibles de cristalización.
El Dr. Wohlt emplea exclusivamente tejido adiposo del cuerpo del paciente para realizar el recubrimiento inferior de la cuerda vocal paralizada. El tejido adiposo del cuerpo del paciente cuenta con la ventaja de que, al contrario de los productos artificiales, no provoca reacciones alérgicas, ya que se trata de material corporal.
Tampoco se esperan reacciones de rechazo. La ventaja particular es la consistencia blanda y suave del tejido adiposo. Este tipo de tejido es especialmente adecuado para el recubrimiento inferior de los pliegues vocales.
Al contrario que en las inyecciones de grasa, existen métodos quirúrgicos denominados tiroplastias, en los que se abre la laringe desde el exterior y se inyecta un bloque de silicona o tiras de Gore-Tex que presionan la cuerda vocal paralizada hacia dentro, pero ese implante no está en condiciones de acolchar un pliegue vocal aflojado.
Sin embargo, eso es posible, precisamente, con el recubrimiento inferior con tejido adiposo del cuerpo del paciente. De este modo se aprovecha la propiedad pastosa y suave del tejido adiposo para adaptar la forma y el volumen del pliegue vocal paralizado a la parte sana. Es posible tener influencia sobre la forma exterior del pliegue vocal. Esto no es posible en las cirugías de medialización como la tiroplastia, que se realizan desde el exterior.
Además, la intervención es ambulante y dura unos 45 minutos. En una tiroplastia, no es necesario abrir la garganta desde el exterior.
¿Cómo se lleva a cabo la operación de parálisis de cuerdas vocales?
En el contexto de una operación, se extrae tejido adiposo del paciente con un pequeño corte en la piel de la zona del ombligo. A continuación, se cierra la herida y se prepara la grasa en base a determinados criterios. Después se inyecta la grasa con precisión en los pliegues vocales paralizados. Es de suma importancia que la grasa recubra la parte inferior en las zonas óptimas de inyección y con una cantidad apropiada. Una cantidad demasiado escasa puede provocar resultados insatisfactorios, igual que una hipercorrección considerable.
Sin embargo, cabe advertir que una cierta hipercorrección siempre puede ser útil, es decir, que siempre debe inyectarse algo más de grasa de la que se requiere para un cierre óptimo de los pliegues vocales.
Esto se lleva a cabo en el contexto de que las partes líquidas de la grasa se resorben durante las primeras semanas tras la intervención en el cuerpo. Por este motivo, hay que inyectar cierta cantidad de reserva de grasa del cuerpo del paciente superando una cantidad mínima en los pliegues vocales.
Inmediatamente después de la operación, el paciente disfrutará de una voz más sonora en la mayoría de los casos. Los resultados suelen ser excelentes. Dado que el paciente no tiene que guardar reposo de la voz durante el postoperatorio, podrá hablar enseguida. Además, notará una mejora importante en relación con la disnea porque estará en condiciones de dosificar la respiración. También notará un avance en la dificultad de deglución (disfagia).
Recubrimiento inferior de las cuerdas vocales (inyección de grasa) en una paciente
1 día preoperatorio
1 día postoperatorio
4 semanas postoperatorio
Recubrimiento inferior de las cuerdas vocales (inyección de grasa) en un paciente
1 día preoperatorio
1 día postoperatorio
3 semanas postoperatorio
¿Cómo transcurre la fase postoperatoria?
Tal y como se le ha indicado al paciente, no será necesario que guarde reposo de la voz después de la operación de parálisis de cuerda vocal (inyección de grasa). La curación de la herida afecta exclusivamente a las zonas de inyección que se cerrarán rápidamente.
Tras un breve periodo de tiempo, el paciente comenzará un tratamiento terapéutico adicional para deshabituarse del modelo de fonación incorrecto que utilizó para compensar la parálisis. Cuanto mayor sea la parálisis recurrencial en los pliegues vocales, habrá que contar con que el subsiguiente tratamiento terapéutico de la voz sea más largo.
Cabe señalar que es posible tratar una parálisis de las cuerdas vocales (parálisis recurrencial) con éxito gracias al método de recubrimiento inferior de los pliegues vocales, y es independiente de su duración.
Incluso pacientes que padecen desde hace varias décadas de parálisis recurrencial en las cuerdas vocales podrán beneficiarse enormemente con este método y recuperarán su voz anterior. La superación emocional de una persona que sufre afonía desde hace 40 años y puede contar con su voz anterior es impresionante.