¿Qué es la parálisis de las cuerdas vocales?
Las cuerdas vocales sanas se desplazan con la respiración y entonación en base a determinadas regularidades. La movilidad de los pliegues vocales afectados se ve parcial o totalmente limitada durante la parálisis de las cuerdas vocales, también denominada parálisis recurrencial o parálisis laríngea.
La causa de la apraxia deriva principalmente de la lesión del nervio de las cuerdas vocales, el nervio laríngeo recurrente, que inerva las cuerdas vocales y es responsable de la correcta movilidad.
La parálisis laríngea puede ser unilateral o en casos poco comunes también bilateral. El cuadro clínico de una parálisis laríngea unilateral se diferencia considerablemente de una parálisis de cuerdas vocales bilateral.
El nervio laríngeo recurrente que inerva las cuerdas vocales recorre un trayecto extenso desde su origen hasta llegar a las cuerdas vocales. Toma su origen en la base del cráneo, atraviesa la zona de la garganta hacia el tórax y desde ese punto, regresa a la laringe.
Su nombre de nervio laríngeo recurrente (del latín, recurrere, regresar) deriva del hecho de regresar a la zona de la laringe desde la zona del tórax.
Parálisis laríngea durante la respiración
¿Cómo se produce una parálisis de las cuerdas vocales?
Existen muchos motivos para que se produzca una parálisis recurrencial. Los más frecuentes son los siguientes:
- Operación de tiroides
- Operación de columna vertebral cervical (CVC)
- Operación de la arteria carótida
- Tumores pulmonares
- Tumores bronquiales
- Otros tumores metastásicos
Con frecuencia también se diagnostica una parálisis de pliegues vocales después de infecciones largas, donde se postula una génesis viral.
Si no es posible localizar un motivo claro de la parálisis de pliegues vocales, se trataría de una parálisis recurrencial denominada idiopática. En este caso, siempre será necesario hacer un diagnóstico por imágenes completo de todo el recorrido del nervio recurrente. Se realizará en una tomografía computerizada (TC) o resonancia magnética nuclear (RMN).
Parálisis laríngea durante la fonación
¿Qué molestias provoca la parálisis de cuerdas vocales?
Una parálisis de cuerdas vocales puede provocar molestias muy diversas. El cuadro clínico se concentra principalmente en tres síntomas.
Los síntomas más comunes en una parálisis de cuerdas vocales unilateral son:
- Afonía
- Disnea
- Atragantamiento
En caso de una parálisis recurrencial, es decir la parálisis de pliegues vocales unilateral, está la afonía más o menos acentuada en un primer plano. La voz es suave, susurrante y algunos casos, prácticamente átona (afónica).
El grado de afonía o de voz aérea depende de la posición y del grado de tensión en los pliegues vocales paralizados. En un espacio breve entre las cuerdas vocales se aspira menos la voz que en un espacio grande, duradero y persistente.
Otro síntoma muy común en la parálisis de cuerdas vocales unilateral es la disnea, es decir la falta de respiración subjetiva que se siente al hablar y en caso de sobrecarga corporal. En el caso de este tipo de disnea no se trata de una falta de oxígeno debida una ventilación insuficiente, sino a un consumo de aire muy elevado debido a la apertura de la glotis.
El paciente ya no podrá dosificar la respiración al hablar ni en la entonación, el aire «se esfuma» y el paciente deberá volver a tomar aire después de emitir pocas palabras. Así resulta una forma de hablar con interrupciones continuas para tomar aire. En caso de esfuerzo corporal o, por ejemplo, al subir escaleras, debido a la incapacidad de dosificar al aire, se consume el aire y se siente subjetivamente como disnea o falta de aire.
El tercer síntoma que suele manifestarse en pacientes con parálisis de cuerdas vocales o parálisis recurrencial es el atragantamiento frecuente. Aparece en particular, en la fase temprana de una parálisis. Los pacientes informan de que tienen que tener mucho cuidado de no atragantarse al beber líquidos con gas.
¿Qué opciones de tratamiento existen?
El tratamiento de una parálisis recurrencial se puede tratar con dos terapias:
- Tratamiento terapéutico de la voz
- Tratamiento quirúrgico de la voz
Tras finalizar el diagnóstico y la exclusión de enfermedades malignas, es importante comenzar lo antes posible el tratamiento terapéutico de la voz. Es fundamental para reactivar rápidamente el nervio y contrarrestar la atrofia del músculo de las cuerdas vocales. Simultáneamente hay que animar al paciente a que hable con normalidad, evitando formas incorrectas, como por ejemplo hablar siempre en voz baja.
Por eso se recomienda un tratamiento terapéutico intenso de la voz, de dos a tres veces por semana. Desde el punto de vista foniátrico, deberá evitarse el hacer poco uso de la voz o la permanencia en silencio durante mucho tiempo, aunque algunos médicos lo siguen prescribiendo. En la mayoría de los casos de parálisis de las cuerdas vocales, en los que el nervio no se ha dañado durante la operación, se logra en un 80-90 % de los casos una recuperación completa del nervio. La terapia de ejercicios de la voz sirve de apoyo en este proceso de regeneración.
En aproximadamente el 10% de los casos con parálisis idiopática de las cuerdas vocales, no se regenera el nervio. La voz sigue en estado afónico o permanece una disnea más o menos incómoda. También hay pacientes afectados por afonía permanente o disnea, que sufrieron daños irreversibles en una operación del nervio de las cuerdas vocales.
A estos pacientes se les puede ayudar de forma increíble con una operación quirúrgica de la voz. En la actualidad, existen varias opciones de intervención quirúrgica en la parálisis de cuerdas vocales.
El método de operación preferido del Dr. Wohlt es el denominado recubrimiento inferior de las cuerdas vocales o el aumento de los pliegues vocales. Este procedimiento se describe detalladamente en la página Operación de parálisis de las cuerdas vocales.
Los resultados de este método de operación son extraordinarios, ya que suelen liberar en poco tiempo a los pacientes afectados de los tres síntomas considerablemente molestos. Por un lado, el paciente pierde la afonía, en la mayoría de los casos recupera el sonido de su voz anterior en un breve plazo de tiempo, se mejora la disnea considerablemente y también se reduce el atragantamiento en gran parte.
Ejemplo del tratamiento quirúrgico de la voz en una parálisis de las cuerdas vocales
Parálisis laríngea antes de la operación
Parálisis laríngea después de la operación
Mitos y verdades de la parálisis de cuerdas vocales
En general, se cuenta con una recuperación de la movilidad en el pliegue vocal paralizado en el plazo de seis meses. Si no se ha alcanzado una calidad satisfactoria de la voz a pesar de las medidas terapéuticas tomadas, se recomienda realizar una fonocirugía en la mayoría de los casos para recuperar la función de la voz.
Pero el intervalo de tiempo no está limitado a seis meses, existen pacientes que recuperan la movilidad de los pliegues vocales tras haber transcurrido un año, aunque la probabilidad se reduce con el aumento de tiempo del trastorno.
En caso de que un paciente no espere este intervalo de tiempo y quiera someterse a una operación de inmediato, podrá hacerlo en cualquier momento. Es posible que no se recupere la movilidad de la cuerda vocal paralizada con la implantación de grasa. Pero quedará “acolchada”, de modo que la otra cuerda vocal sana vuelva a ocupar su lugar durante la entonación superando la línea central y se cierren por completo las cuerdas vocales. Así el paciente recuperará su voz anterior.
Si el pliegue vocal paralizado se recupera, independientemente de la operación, y recupera su movilidad natural, no se habrá producido ningún daño con el recubrimiento prematuro, sino que se habrá reducido únicamente el intervalo de la afonía.
Ejemplo de un caso con parálisis de las cuerdas vocales
Una profesora de primaria de 46 años será operada debido a la sospecha de sufrir un trastorno grave en la tiroides. Inmediatamente después de la operación nota una ronquera marcada. Su voz es aérea, baja y roza la afonía. No le es posible emitir un sonido fuerte aunque se esfuerce mucho.
Además sufre una disnea pronunciada. Al pronunciar pocas palabras, tiene que coger aire de nuevo, su esfuerzo corporal también se complica mucho. También se atraganta normalmente al beber líquidos y tose mucho.
Durante su hospitalización, se le diagnosticó una parálisis de cuerdas vocales en el posoperatorio. La paciente recibirá el alta en unos días y se recomienda que realice un tratamiento de ejercicios de voz con un terapeuta.
El análisis videoestroboscópico del especialista presenta una paralización de los pliegues vocales izquierdos. No se consigue cerrar los pliegues vocales a pesar de mucho esfuerzo. Queda un espacio restante de entre cuatro y cinco milímetros. La voz es aérea y roza la afonía, la posición media de la voz se ha elevado claramente.
Se recomienda a la paciente que reciba una terapia logopédica intensiva, tres veces al día. Después de haber transcurrido cuatro semanas, se constata, en la revisión médica, la recuperación de la movilidad en el pliegue vocal afectado.. Mientras tanto realiza un tratamiento de ejercicios terapéuticos de la voz, y ya no se observan limitaciones en la voz. La voz tiene las mismas propiedades que antes de la operación de tiroides, la disnea ha desaparecido, al igual que el atragantamiento.